viernes, 29 de noviembre de 2013

Brunch






Brunch es un neologismo a partir de la unión de breakfast (desayuno) y lunch (almuerzo).

Consiste en una comida realizada por la mañana entre ambos y se sirve por regla
general en un periodo de tiempo que va desde las 10 a las 13 horas.




Si tuviera que elegir cuáles son para mí los máximos placeres confesables,
no dudaría en decir que el chocolate y levantarme tranquilamente,
sin despertador, cuando el cuerpo lo pide.




Eso significa que cuando tengo un fin de semana para mí sola
me levanto tarde, muy tarde...

Tanto que ya no es hora para desayunar pero tampoco aún para comer.




Entonces, tranquilamente, me preparo cualquier cosita que comer.

Unas pequeñas hamburguesas, por ejemplo, que acompaño
con té frío al limón.

Un bruch frugal para compartir en el Finde Frugal de
Colorín Colorado como cada viernes.

¡Os deseo un feliz fin de semana!








jueves, 28 de noviembre de 2013

¡Sorpresa por sorpresa!






Una de las cosas más satisfactorias que tiene el mundo blogger es
poder conocer a personas con tus mismos gustos e intereses.

En algunos casos se llega incluso más allá.
Te sorprendes comprobando que con ciertas personas no sólo
compartes gustos si no que te reconoces en muchos aspectos conforme
las vas conociendo a través de su espacio web y de las redes sociales.

Me ha ocurrido en más de una ocasión, como con nuestra anfitriona
de los jueves, Verónica, del blog Nika Vintage.

Para su blog hop de hoy unas fotografías que nos muestran de cerca
dos piezas: una de llegada y la otra de ida.




Y también me ocurrió con Elena, del blog Las Cosas de Cósima.

Su fantástica fotografía me llevó a ser asidua de su blog,
a pesar de ser la comida "el plato fuerte" del mismo y no ser yo
una cocinera vocacional.

La interpretación de las recetas por Elena es siempre original,
es especialista en hacer salado un plato dulce porque ella
no es golosa (en esto somos radicalmente distintas) y dejarme
con la boca abierta y unas ganas inmensas de probarlo.

Pero el blog de Cósima no es un blog de cocina, no sólo al menos.
Viajes, fotografía, gente interesante y arte tienen cabida en su espacio.

No ha estudiado cocina de forma académica, ni es una profesional
de este campo, es una apasionada de los sabores, los aromas
y tiene una mano especial para ello.

Su formación es de restauradora de bienes culturales, especializada
en pintura y, aunque desde hace unos años tiene esta faceta algo
desatendida, se ha propuesto retomarla con fuerza y está decidida
a volver a mancharse "las manos con acrílicos y óleos".

Y, por supuesto, compartir sus creaciones y conocimientos en su blog.

Cuál fue mi sorpresa, que el día que anunciaba la intención de retomar
su faceta artística, lo hacía con un trabajo que iba dirigido a mí.


Fotografía Cósima Piovasco

Sí, no podía ser de otro modo:
una H trabajada con chalk paint para mi colección.

Quedamos, nos conocimos personalmente, pasamos una tarde de
lo más agradable compartiendo experiencias vitales y blogueras,
me traje su preciosa H a casa.




Aquí la veis acompañada de mis otras H.

La grandota en azul celeste la encargué con medidas especiales en

*

Y ahora soy yo quien quiero agasajar a Cósima con una de mis
creaciones, también personalizada por supuesto.




He diseñado a mano para ella una taza personalizada con su
verdadero nombre: elena saliendo de un pincel.




Y, claro, volveremos a quedar para la entrega y volveremos a pasar
una tarde estupenda compartiendo las miles de cosas que nos unen.

Espero que te guste, Elena.

¡Sorpresa por sorpresa!


^-^









lunes, 25 de noviembre de 2013

Lámparas colgantes * Buscando inspiración






Cuando me mudé a mi vivienda actual pude adaptar muchas de
las lámparas que tenía en mi casa anterior.

Para el salón elegí una lámpara holandesa de tres brazos a
la que tengo especial cariño pues era del cuarto infantil de Javier.

Originariamente era de color azul celeste y la pinté en blanco
para ponerla en el salón de la nueva casa.




El salón tiene dos puntos de luz en el techo.

Uno centrado, en el que puse la lámpara holandesa, y otro
demasiado próximo a la puerta del salón como para poner
otra lámpara de brazos.

Además, al tratarse de un apartamento, no quise cargar
demasiado los techos ya de por sí no muy altos.




Finalmente me he decidido a buscar una sencilla lámpara de casquillo
con bombilla vista y largo cable que poder llevar a una de las paredes
próximas y dejarla colgando como iluminación complementaria.

En la imagen de arriba he hecho una simulación pero son muchos
los ejemplos que podemos ver en la red de este tipo de lámparas
que, solas o en cascada, se han convertido en must decorativo.


Vía Comodos

Vía Acotío Decó

Vía Petite Candela

Vía My Leitmotiv

Vía facilisimo

Vía dar amïna

Vía deleite desing

Si más adelante nos cansamos de ver la sencilla y funcional bombilla,
podemos añadirle algún tipo de pantalla o complemento.


Vía La Musa Decoración

Vía I.D.E.A.

Vía Emérita Desastre

¿Que os parecen?





viernes, 22 de noviembre de 2013

Mi Calendario de Adviento 2013






Después de empaparme de inspiración para elaborar mi
calendario de Adviento de este año,
opté por intentar hacer uno original y propio.




Puesto que son tendencia las formas geométricas en decoración
y además me encantan, decidí hacer mi calendario fabricando
veinticuatro piezas y montarlas como un móvil colgante.

Utilicé materiales que tenía en casa: unas carpetas de cartulina kraft,
palillos chinos en madera natural y cordel de lino.

Un DIY pues baratito y sencillo que mostrar un viernes más
en el Finde Frugal de Colorín Colorado.




Descargué de la red e imprimí en folios algunos desarrollos de poliedros:
cubo, pirámide, octaedro y dodecaedro.





Recorté cada una de las figuras y las fui traspasando a las cartulinas:
ocho pirámides, ocho cubos, siete octaedros y un gran dodecaedro.

En total veinticuatro piezas, una por cada día de Adviento, dejando
el dodecaedro para el día veinticuatro de diciembre para llenarlo
con un contenido especial por ser el día que comienza la Navidad.




Recorté cada una de las figuras...




Doblé los pliegues de lados y lengüetas...




Hice un agujerito en uno de los lados de cada figura para luego
pasar un cordón de lino.




Fui pegando las lengüetas con la pistola de pegamento caliente
para ir montando las figuras.




Una vez montadas las rellené con dulces y chuches.





Y, como en esta casa no se tira nada, nada, nada,
aproveché los recortes sobrantes de las cartulinas para troquelar
unas etiquetas a las que también hice su correspondiente agujerito.




Pinté del uno al veinticuatro en las figuras y palabras fraternales
en las etiquetas.




Finalmente monté unas aspas con los palillos y fui colgando
las figuras a distinta altura, dejando el dodecaedro como figura central
y poniendo en cada extremo de los palillos una etiqueta.




Resultado, un sencillo Calendario de Adviento con un toque oriental
que he colgado de una de las lámpara del salón a la espera de que
llegue el uno de diciembre para empezar a abrir las figuras y
comenzar la cuenta atrás hasta Navidad.










¡Os deseo un feliz fin de semana!